Las fuentes de financiación las podemos clasificar como fuentes de financiación propias y ajenas.
Las fuentes de financiación propias se caracterizan por no tener un plazo preestablecido para su amortización ya que sus acreedores son los mismos propietarios de la empresa.Entre las fuentes de financiación propias podemos nombrar:
Las fuentes de financiación ajenas son aquellas que van a prestarnos dinero y que tendremos de devolver a un coste (interés). A estas son las que les vamos a dedicar las páginas siguientes.
La financiación de la pyme española a partir de recursos ajenos supone, de forma conjunta, el 66% de su pasivo y si tenemos en cuenta que las pymes suponen cerca del 95% de nuestro tejido empresarial, la dificultad actual para acceder a financiación provoca un importante parón económico.
En los últimos tiempos la posición de los emprendedores, autónomos y Pymes cuando acuden a un banco se parece más a la del 'pedigüeño de la puerta de la iglesia' que a la de un profesional que ofrece una solución win-win.
El panorama financiero se presenta bastante negro. En gran medida, porque la mayoría de los expertos apunta a que el reajuste financiero exigido a las entidades, en el que tendrán que hacer frente a la deuda exterior y en el que deberán afrontar también el incremento de impagados , seguirá derivando en falta de crédito por parte de las entidades.
Esta escasez de liquidez que sufre el sistema, eleva la prima de riesgo y obliga a las entidades financieras a establecer estándares más exigentes en la medición de los riesgos
Bancos y cajas de ahorro, afirman que las condiciones de acceso no han cambiado porque siguen valorando los mismos aspectos que antes y que en ningún momento, se ha restringido el crédito a las empresas, que tan sólo se está siendo más prudente y selectivo de acuerdo con las circunstancias actuales del mercado y la evolución de la economía
En cambio la opinión de los colectivos empresariales dista mucho de esa perspectiva: la idea generalizada es que el 'grifo' se ha cerrado y que el dinero que el Estado ha inyectado en el mercado a través de los bancos se ha quedado en esas entidades financieras para sanear sus balances y no está llegando realmente a particulares y empresas
Por una parte, es evidente que se han endurecido tremendamente las condiciones de crédito Las exigencias de garantías han pasado del 61% al 71%, y los gastos y comisiones se han incrementado un 76%. También se ha reducido el volumen de financiación ofrecido y el plazo de devolución
Pero el problema no son los créditos que dejan de pedir las empresas, sino los que 'cortan' los bancos. El auténtico drama es cuando se tiene una póliza de crédito y la entidad afirma que no puede renovarla, porque en España se ha financiado mucho la actividad empresarial con ese producto que se iba renovando año tras año, y la empresa ya contaba con que se lo iban a renovar automáticamente.
Las empresas que tienen más dificultades ahora mismo para encontrar financiación son aquellos negocios con una actividad convencional, que tienen mucha competencia, que no presentan nada diferente, y que, de alguna manera, han sufrido una fuerte reducción de sus ventas.
En estos momentos, lo que más miran las entidades financieras es que se tenga capacidad de devolver el dinero (solvencia) y eso se demuestra con los flujos de caja que pueda generar la empresa en los próximos años, pero es tan elevada la incertidumbre sobre esos flujos futuros que son tan duros y restrictivos a la hora de conceder créditos.
El préstamo es un contrato por el que la entidad financiera entrega una cantidad de dinero a la empresa para la financiación de una operación de inversión concreta, y ésta por su parte, se compromete al pago de cuotas periódicas que comprenden amortización del capital recibido y pago de los intereses pactados.
La concesión de un préstamo bancario requiere el estudio previo de la operación por la comisión de riesgos de la entidad financiera, y normalmente, la solicitud de garantías que cubran la posibilidad de riesgo de impago por parte del deudor.
¿Qué garantías puede exigir la entidad financiera en la formalización de un préstamo?
¿Qué tipo de interés utiliza la entidad financiera?
¿Qué costes se derivan de una operación de préstamo?
Desventajas de los préstamos:
TIPOS DE PRÉSTAMOS
PRÉSTAMO A TIPO VARIABLE. El tipo varía en función de determinados índices a los que se suma un diferencial acordado (EURIBOR, Deuda Pública, etc.).
PRÉSTAMO CON GARANTÍA REAL. La garantía será de un bien mediante la constitución de una prenda o hipoteca.
PRÉSTAMO CON GARANTÍA PERSONAL. Suele ser el normal en los préstamos al consumo. Se garantiza el préstamo con los bienes que tenga el deudor
PRÉSTAMO CON CARENCIA. Consiste en pagar únicamente intereses en un periodo determinado y posteriormente capital e intereses
EL AVALISTA Y SUS OBLIGACIONES
Las obligaciones que asume el avalista son máximas:
Contrato por el que la entidad financiera pone a disposición de la empresa fondos hasta un límite determinado, articulados en una cuenta corriente. Por su parte, la empresa se compromete al pago periódico de intereses sobre las cantidades dispuestas y a la devolución del principal al finalizar el plazo del contrato pactado, plazo inferior a un año. Las entidades financieras pueden así mismo cobrar intereses sobre las cantidades no dispuestas.
Mediante este tipo de cuentas, donde su saldo estará en función de nuestras necesidades de financiación, podemos domiciliar todo tipo de pagos y cobros durante su vigencia, incluso puede llegar a tener saldo positivos que se remuneran a un interés pactado previamente.
Otra de sus principales ventajas es que no existe un límite en el importe máximo de que podemos disponer, sino que este límite vendrá determinado en función de nuestra capacidad de endeudamiento y las necesidades de tesorería. La entidad financiera no nos financiará en el 100% sino que estudiara aspectos de nuestro negocio como período medio de maduración de nuestra actividad, la necesidad global de liquidez para ese período... para determinarnos el límite que esta dispuesta a financiarnos.
Son operaciones diseñadas para muy corto plazo, frecuentemente entre seis meses y un año. Aunque pasado este tiempo pueden renovarse siempre que nuestra situación no hubiese variado respecto de las circunstancias iniciales.
En las pólizas de crédito se exigen idénticas garantías que en los préstamos, es decir, pueden ser garantías reales o personales, incluso pueden necesitarse avalistas para llevar a cabo la operación.
Se utiliza un sistema de amortización similar a los préstamos americanos, es decir, el capital se devuelve de una vez el último día de vigencia de la operación, aunque podemos ir devolviendo el importe de la póliza en pagos sucesivos.
Es un instrumento financiero adecuado para financiaciones no vinculadas a una operación de inversión concreta.
Las cuentas de crédito tienen una gran importancia para las empresas y profesionales debido a que pueden coordinar sus flujos de cobros y pagos, evitando de esta forma su falta de liquidez que puede provocar ciertos problemas en nuestro negocio.
Tanto el descuento comercial, que veremos posteriormente, como la póliza de crédito son dos de los instrumentos que la pyme utiliza para la gestión de su activo circulante cuando de una forma recurrente sus periodos de pago son inferiores a los periodos de cobro, es decir, cuando sistemáticamente hay desfases en la tesorería de la empresa.
Como ya vimos en las 'Consideraciones Generales', su restricción por parte de las entidades financieras afecta de forma muy negativa a la liquidez de la pyme al no poder ésta cubrir este desfase habitual que además se agrava en épocas de crisis por el retraso o morosidad e incluso impago de sus clientes que se ven afectados por el mismo problema
Generalmente las operaciones de crédito se efectúan a un interés fijo, aunque pueden existir casos donde se formalicen a tipo variable referido a Euribor.
Cuando analizamos el crédito debemos fijarnos en los tres tipos de interés existentes:
a) Interés deudor, se corresponde con el interés que nos cobrará la entidad financiera por el saldo dispuesto de nuestra cuenta.
b) Interés acreedor, que consecuencia de nuestra operativa en la cuenta, podemos encontrarnos con este tipo de saldo que pueden ir remunerados a un tipo de interés previamente pactado.
c) Interés de excedido, se corresponde con el interés que devenga los saldo que superan el límite de la póliza
La liquidación de intereses suele ser trimestral efectuándose mediante el método denominado Hamburgués, además tenga en cuenta que al cargar los intereses en la misma cuenta de la póliza de crédito también devengan interés a favor de la entidad
En las pólizas de créditos nos cobran dos tipos de gastos:
a) De formalización y apertura:
b) Propios de las operaciones.
En el cálculo del coste efectivo de la póliza de crédito debemos tener en cuenta todas las variables como tipo de interés, frecuencia de liquidación, comisiones... También debemos tener en cuenta el saldo no dispuesto y ser conscientes que tener una póliza de crédito ociosa tendrá siempre un coste financiero, por lo que cuando queramos utilizar este instrumento de financiación deberemos haber analizado suficientemente nuestras previsiones financieras para no cometer errores de sobre-financiación
La gran ventaja de la cuenta de crédito es su flexibilidad, lo fácil que resulta disponer de los fondos.
Los créditos unidos a los préstamos es la operación de financiación de activo más frecuente. Su principal diferencia es, que mientras los préstamos siempre están unidos a una operación de compra o prestación de servicios, en los créditos no existe ninguna vinculación a una finalidad, es decir, son operaciones donde no se financia la adquisición de un determinado bien o servicio, sino que obtenemos dinero para usarse en un determinado sentido.
Comparativa |
Préstamo |
Crédito |
Definición |
Contrato bancario que permite al prestatario, recibir una determinada cantidad de dinero de una vez a cambio del compromiso de devolver dicha cantidad, junto con los intereses correspondientes, mediante cuotas periódicas. |
Contrato por el que una entidad se compromete a facilitar una cantidad de dinero a un cliente hasta un límite determinado y durante un periodo de tiempo. |
¿En qué vamos a emplear el dinero |
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¿Cuál es la cantidad que necesitamos? |
Resulta más apropiado cuando las cantidades son más elevadas |
Se adecua mejor a necesidades menores y momentáneas de dinero |
¿Cómo vamos a devolver el dinero? |
Tenemos unos ingresos regulares y podemos ajustarnos a un sistema periódico de cuotas |
Los ingresos no son regulares y aunque podemos devolver la cantidad prestada, no podemos hacerlo en cuotas uniformes. |
Existen diversos medios para instrumentalizar el pago de operaciones comerciales con aplazamiento de pago, entre los que adquieren especial importancia la letra de cambio, el cheque y el pagaré.
Los efectos comerciales posibilitan a su tenedor el acceso a financiación a través del descuento de los mismos. En la actualidad, la práctica bancaria ha extendido la posibilidad de descuento a letras de cambio, pagarés, cheques, talones, certificados, contratos, pólizas, recibos tramitados electrónicamente…
El descuento comercial es un contrato por el que la entidad financiera anticipa a la empresa el importe de los efectos no vencidos recibidos de clientes, efectos que reconocen una obligación de pago. La entidad descuenta del importe de los efectos (nominal), los intereses que corresponden por el tiempo que media entre la fecha del anticipo y la fecha de vencimiento de los mismos, así como los gastos y comisiones que se derivan de la operación (descuento).
La entidad financiera gestiona a su vencimiento el cobro de los efectos anticipados, pero no asume el riesgo de impago si finalmente el deudor no paga las mismas, ejerciendo la acción de recobro sobre la empresa.
Se recomienda que los efectos sean domiciliados, puesto que en los no domiciliados las tasas de comisión son más elevadas. Las comisiones tienen marcado un importe mínimo por efecto, pero no uno máximo, siendo éste proporcional al importe. Los efectos deben ir extendidos en papel timbrado y tributar por el Impuesto de actos jurídicos documentados.
Los principales usuarios del descuento son los comerciantes individuales y las sociedades mercantiles, si bien otras entidades aún no siendo mercantiles, pueden descontar sus efectos
El descuento comercial puede instrumentalizarse a través de:
A.- Línea de descuento: La entidad financiera, una vez estudiada la empresa y la 'calidad del papel' (comprobación de que efectivamente se trata de operaciones de compraventa reales, y no de letras ficticias, llamadas 'letras pelota') y analizado el riesgo comercial del cliente, le permite el descuento de facturas hasta el límite del importe de la línea de descuento concedida. Se producen los siguientes hechos:
B.- Descuento puntual o circunstancial: La entidad financiera estudia el descuento de un efecto comercial de forma individualizada o varios (remesa), sin que se presuponga el descuento de otra u otras remesas fururas. Dado su carácter circunstancial no es necesario instrumentalizarlo mediante póliza de descuento.
Así mismo, y en función de la forma de liquidación que la entidad aplique, podemos hablar de:
Ventajasdel descuento comercial:
Desventajas del descuento comercial:
Antes de pasar revista a aquellos productos de más interés para la operatoria del comercio minorista, hay que destacar cuáles son las características de estos 'nuevos' productos
Mediante el factoring, la empresa contrata un conjunto de servicios de cobertura de insolvencia, gestión y financiación aplicable a las ventas a crédito (ventas con pago aplazado entre 30 y 270 días) realizadas a sus clientes,convirtiendo las ventas a corto plazo en ventas al contado, asumiendo el riesgo de insolvencia del titular y encargándose de su contabilización y cobro
Cuando una empresa realiza numerosas ventas a crédito a sus clientes, tiene que añadir a su actividad productiva las siguientes preocupaciones:
Mediante el factoring, la empresa contrata un conjunto de servicios de cobertura de insolvencia, gestión y financiación aplicable a las ventas a crédito realizadas a sus clientes, tanto nacionales como extranjeros.
El FACTORING contempla un conjunto de servicios que se basan en la cesión de facturas comerciales de una empresa a la Entidad de Factoring, para que ésta preste uno o varios de los siguientes servicios:
Dichos servicios se ofrecen a partir de la 'cesión mercantil' de las facturas a cobrar a una entidad bancaria o entidad de financiación (el 'factor').
El factoring es apto sobre todo para aquellas PYME cuya situación no les permitiría soportar una línea de crédito.
Componentes de una operación de factoring
EL FACTORING PROVEEDOR es un producto, conocido habitualmente como "CONFIRMING". El Confirming consiste en mejorar la gestión de pagos de una empresa a sus proveedores, a partir de la subcontratación de la misma. El servicio es ofrecido por entidades financieras y consiste en gestionar los pagos de una empresa a sus proveedores nacionales, ofreciéndole a éstos la posibilidad de cobrar las facturas con anterioridad a la fecha de vencimiento.
Es una fuente de financiación para la empresa (aplazando el pago de las deudas) como para los proveedores (anticipando el cobro de las mismas).
Aparecen tres actores:
La denominación "Sin recurso" indica que, en el momento de producirse la adquisición, el "Proveedor" emisor de las facturas queda liberado de cualquier eventualidad, asumiendo la entidad financiera todo el riesgo de la operación y pudiendo, en caso de impago, entablar solamente procedimiento contra el Cliente deudor y, en su caso, los garantes de la operación.
a) Recepción de compromisos de pago
La empresa pagadora ordena irrevocablemente, a la Entidad financiera, el pago a su cargo de deudas o facturas a las que ha dado su conformidad, a favor de unos determinados proveedores y con fechas de vencimiento concretas.
b) Comunicación a proveedores
La Entidad financiera remite cartas a los proveedores incluidos en el soporte, avisando de ser la Entidad, encargada del pago de las facturas a sus respectivos vencimientos. En la misma comunicación, la Entidad financiera , oferta la compra "Sin recurso"(dicho de otra manera, la entidad financiera ofrece anticipar el cobro) a dichos proveedores de sus facturas, antes de la fecha de vencimiento del pago, en unas condiciones determinadas, generalmente con un diferencial ya pactado con el CLIENTE sobre el MIBOR vigente en cada momento según los días que restan para cada vencimiento.
c) Respuesta de los Proveedores
Case de aceptación por el proveedor, con la antelación requerida, se realizara la operación, abonándole el importe neto mediante transferencia.
Caso de no optar por el anticipo, el abono por el nominal se producirá en la fecha de vencimiento de cada factura.
d) Información a Cliente
La Entidad financiera informa periódicamente a la empresa CLIENTE, de las compras "Sin recurso" (Anticipos) que haya efectuado y los proveedores con quienes se han formalizado tales operaciones .
e) Vencimiento de las facturas y abono de compensaciones
Al vencimiento correspondiente, la Entidad financiera carga en la cuenta de la empresa el importe nominal de todas las facturas que esta le ha ordenado pagar en su día.
Al mismo tiempo, la Entidad financiera, en su caso, abonará en la cuenta de la empresa el importe correspondiente al porcentaje, si así se ha negociado entre ambos, de los márgenes y/o comisiones aplicados en las compras de facturas "Sin recurso" (Anticipos) que se hayan efectuado a los proveedores.
Como DESVENTAJA, hay que tener en cuenta que, por las características del producto, se suele adoptar un criterio selectivo a la hora de su comercialización, ofertándolo habitualmente a empresas de una envergadura suficiente que permita a la Entidad Financiera rentabilizar el trabajo administrativo que conlleva
Contrato por el que la empresa de renting se obliga a poner a disposición del cliente un activo en régimen de arrendamiento y por un plazo de tiempo determinado. Por su parte, el cliente se obliga al pago de una renta periódica, renta que incluye el uso del bien, así como los gastos de mantenimiento y seguro que cubra posibles siniestros al mismo.
El renting es por lo tanto una fórmula que combina financiación con contratación de servicios.
Se aconseja su utilización para acceder a equipos informáticos de última generación, así como a equipos de transporte, elementos caracterizados por su rápida obsolescencia.
a) El solicitante selecciona un activo (maquinaria, instalación, etc.) que precisa para su funcionamiento.
b) La empresa de renting adquiere el bien seleccionado al proveedor y contrata tanto el mantenimiento como el seguro del mismo. En esta situación lo pone a disposición del solicitante mediante la firma de un contrato de renting.
c) El solicitante se compromete a abonar a la empresa de renting cuotas periódicas de alquiler pactadas en el contrato durante el plazo de tiempo definido en el mismo.
Contrato de arrendamiento financiero con opción de compra de un bien mueble o inmueble. La operación de leasing es más propiamente una operación de compra-venta con pago aplazado, que un alquiler.
En ella intervienen las siguientes figuras:
El funcionamiento de una operación de leasing es el siguiente:
Se aconseja su utilización para la financiación tanto de activos mobiliarios –maquinaria, vehículos, equipos proceso información, etc.-, como de activos inmobiliarios.
Podemos señalar los siguientes tipos de operaciones de leasing:
Operación consistente en que el bien a arrendar es propiedad de la empresa que lo vende a la entidad de leasing o renting para que ésta de nuevo se lo ceda en arrendamiento.
Ambas fórmulas consisten en transferir la propiedad de los bienes titularidad de la empresa a una entidad financiera, recibir el importe que se pacte por dicha transferencia de titularidad, garantizarnos su uso mediante unos contratos de leasing o renting y pagar las correspondientes cuotas mensuales por el uso de los bienes.
Las diferencia principal entre ambos contratos estriba en la opción de compra.En el caso de los leasing se permite ejercitar la opción de compra, y para el caso de los rentings sólo se realiza alquiler, con lo cual los rent-backs se utilizan para equipos tecnológicos y vehículos, con valores residuales bajos o tendentes a cero y el lease-back se utiliza en inversiones inmobiliarias dentro de la empresa como pueden ser naves industriales u oficinas, dado que a priori se presupone revalorización de los activos.